martes, 27 de octubre de 2009

El cavernicola


Nacho Novo nos cuenta en el teatro Figaro-Adolfo Marsillach el distinto prisma desde el que ven la vida hombres  y mujeres. Para ello se remonta a la época de las cavernas, en las que los hombres se dedicaban a cazar y las mujeres a recolectar. La obra está muy bien, porque se producen dos tipos de risas entre el publico: las carcajadas por lo divertido que es Nacho  y las sonrisas complices entre las parejas por lo identificados que se sienten con las situaciones que va describiendo. Si vais en pareja, seguro que dias despues todavía haceis alusiones a comentarios del monologo. Merece la pena.

No hay comentarios:

Publicar un comentario